Accionistas de Falabella discutieron venta del 20% de Farmacias Ahumada

Tres de las siete ramas de la firma propusieron ese camino, molestas por cómo Fasa manejó el caso colusión. Juan Cuneo las convenció de permanecer en la cadena.

Directo y ejecutivo. Esas son algunas de las características que destacan quienes conocen a Juan Cuneo, vicepresidente ejecutivo de Falabella. Y desde el 23 de marzo, cuando Fasa dio a conocer el acuerdo de conciliación al que llegó con la Fiscalía Nacional Económica (FNE) en el que admitió prácticas colusivas para alzar precios, el empresario ha puesto a prueba todas sus dotes de negociador. Juan Cuneo y Juan Benavides, gerente general corporativo del retailer, ambos directores de Falabella en Fasa, alegan que no se les informó adecuadamente.

Las diferencias con los controladores de Fasa, José Codner y su familia, no fueron indiferentes para los socios de Falabella. Tres de las siete familias controladoras -que en conjunto tienen el 87,6% de Falabella- propusieron salir de la propiedad de Fasa. El tema, dicen fuentes cercanas al grupo, fue debatido en el instante más álgido del caso, semanas atrás, pero la idea no fructificó. En parte, gracias a la posición de Reinaldo Solari, presidente de Falabella, y Juan Cuneo, quienes convencieron al resto de mantener el 20% de Fasa.
"Que los directores de Falabella no fueran informados de la conciliación con la fiscalía fue tomado como una falta de respeto. Se traspasaron las normas básicas de convivencia entre accionistas", dice un director de la compañía. También influyó en el descontento que el caso Fasa impactó en el bajo perfil que los accionistas de Falabella, incluida la familia Del Río, decidió preservar tras la exposición por la fallida fusión con D&S.
Fueron las ramas de las tres hermanas Solari Falabella las más molestas: Liliana, Teresa y María Luisa. Carlos Heller, hijo de Liliana (que tiene el 12,61% de la propiedad), director de Falabella y vicepresidente de Bethia, mostró su descontento. "El preguntó cuál era la idea de mantenerse en la empresa después de lo ocurrido", dice un ejecutivo que conoció el debate.
Lo mismo ocurrió con los directores María Cecilia Karlezi, hija de María Luisa Solari y con Juan Carlos Cortés, hijo de Teresa Solari.
Juan Cuneo defendió otra posición que concitó apoyo mayoritario. "Explicó que Falabella no sale arrancando de ningún negocio", dice un director del retailer, que agrega que Cuneo y Benavides están dispuestos a defender la posición de la firma en Fasa las veces que sea necesario.
"No tienen miedo al enfrentamiento, pero tampoco quieren que sea una batalla sin cuartel, exigen transparencia en el directorio de Fasa y en la medida que eso se dé, se sentirán tranquilos", agrega. Eso es lo que Cuneo y Benavides pidieron esta semana en una conflictiva junta de accionistas, donde se volvieron a enfrentar con José Codner.
Por otro lado, está el negocio: Fasa sigue siendo atractiva para Falabella por el rubro del crédito, a través de la tarjeta CMR. Decididos ahora a mantenerse en Fasa, los accionistas de Falabella sacaron una lección que aplicarán a futuro: si los invitan a un negocio, convertirse en minoritarios será analizado más de una vez.

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