Netflix pasó de ser el principal servicio de alquiler de películas a domicilio a distribuir películas en línea. El modelo está desplazando las tiendas de alquiler de películas y amenaza a la televisión por cable.
Blockbuster, la cadena de películas más grande de Estados Unidos, anunció el cierre de más de 960 tiendas alrededor del mundo para salvarse de caer en bancarrota. La razón, las pérdidas que ha acumulado por el surgimiento de nuevos modelos de alquiler de videos, principalmente por la competencia en precios de cadenas como Netflix y Redbox, dos negocios que gracias a sus menores costos fijos han llevado a que muchas de las tiendas tradicionales estén desocupadas durante todo el día.Mientras en Estados Unidos Blockbuster cobra US$3 por el alquiler de una película, Redbox ofrece en pequeños kioscos rojos los mismos estrenos por US$1 y Netflix los envía a domicilio por US$2,5. El servicio de Netflix incluye adicionalmente una oferta de películas descargables en alquiler a través de la consola Xbox 360 de Microsoft y espera expandirse a tantos dispositivos como le sea posible, según declaraciones recientes a Reuters del CEO de la empresa, Reed Hastings. "Nos gustaría expandirnos en todas las consolas, todos los reproductores de Blu-ray y todas los televisores conectados a internet. Estamos trabajando en paralelo con todas las compañías. En la actualidad, nuestro acuerdo con Xbox es exclusivo y no hemos ido más allá", comentó.Después de trabajar por más de cinco años en el diseño y fabricación de un dispositivo para llevar al cliente sus películas, parecido a un iPod, Hastings ha decidido dar un paso más atrevido y abandonar la idea del Netflix Player. Se trata de la librería Netflix, algo así como el iTunes de las películas, que permitirá a sus suscriptores descargar, de forma ilimitada y sin ningún costo, películas y programas de televisión directamente al televisor.El CEO de la compañía anunció a la revista estadounidense Wired, que planea ofrecer la totalidad de los títulos existentes en DVD "de forma instantánea, en alta resolución, a cualquier televisor, en cualquier parte del mundo". Las compañías de televisión por cable serían las principales perjudicadas de llegar a realizarse el sueño de Hastings, quien desde la fundación de la compañía, en 1997, tuvo en mente la idea de ofrecer sus servicios por internet y no solo por correo tradicional. La nueva operación del negocio comenzó por hacer uso del servicio a computadores y consolas de video, para lo cual firmó un convenio de exclusividad con Xbox. Pero ahora que las conexiones a internet son cada vez más frecuentes en los televisores y que la tecnología de los teléfonos móviles lo permite, Netflix buscará ofrecer sus servicios a una red más amplia de usuarios. De hecho, el CEO de la compañía no descarta que pronto comience el desarrollo de una aplicación que les permitiría a los usuarios de iPhone acceder al servicio, según comentó en una entrevista con Reuters.Actualmente, cerca de tres millones de personas utilizan los servicios virtuales de Netflix y se descargan alrededor de cinco millones de películas y programas de televisión por semana. Se espera que para finales de este año, cerca de diez millones de electrodomésticos estén equipados con Netflix y "es posible que en pocos años, casi la totalidad de aparatos electrónicos con conexión a internet incluyan Netflix", aseguró Hastings a Wired.El alcance del servicio tiene preocupados a muchos en el negocio de la televisión y las películas. Y no es para menos, la empresa está empleando estrategias de innovación abierta para buscar la colaboración de investigadores del mundo entero. Recientemente, Netflix otorgó un incentivo de US$1 millón a un grupo de siete científicos e ingenieros que diseñaron un método para pronosticar la clase de películas que prefieren los clientes con miras a mejorar su sistema de recomendación de películas. Y ya tienen gente de todo el mundo pensando en dos nuevos retos, para los que ofrecen US$500.000 y US$1 millón.Después de haber sacudido el mercado de los alquileres de películas en Estados Unidos y de impactar negativamente la venta de DVD en ese país, por ofrecer un servicio más barato, fácil, cómodo y más conveniente para los clientes que las tiendas de video, la acción de Netflix pasó de su nivel más bajo en un año, US$17,9 por acción el pasado 27 de octubre, a su máxima valoración, US$50,24 el 13 de abril de este año, precio que podría superar en lo que resta del año. La amenaza de Netflix ahora es para las compañías de televisión por cable.
Blockbuster, la cadena de películas más grande de Estados Unidos, anunció el cierre de más de 960 tiendas alrededor del mundo para salvarse de caer en bancarrota. La razón, las pérdidas que ha acumulado por el surgimiento de nuevos modelos de alquiler de videos, principalmente por la competencia en precios de cadenas como Netflix y Redbox, dos negocios que gracias a sus menores costos fijos han llevado a que muchas de las tiendas tradicionales estén desocupadas durante todo el día.Mientras en Estados Unidos Blockbuster cobra US$3 por el alquiler de una película, Redbox ofrece en pequeños kioscos rojos los mismos estrenos por US$1 y Netflix los envía a domicilio por US$2,5. El servicio de Netflix incluye adicionalmente una oferta de películas descargables en alquiler a través de la consola Xbox 360 de Microsoft y espera expandirse a tantos dispositivos como le sea posible, según declaraciones recientes a Reuters del CEO de la empresa, Reed Hastings. "Nos gustaría expandirnos en todas las consolas, todos los reproductores de Blu-ray y todas los televisores conectados a internet. Estamos trabajando en paralelo con todas las compañías. En la actualidad, nuestro acuerdo con Xbox es exclusivo y no hemos ido más allá", comentó.Después de trabajar por más de cinco años en el diseño y fabricación de un dispositivo para llevar al cliente sus películas, parecido a un iPod, Hastings ha decidido dar un paso más atrevido y abandonar la idea del Netflix Player. Se trata de la librería Netflix, algo así como el iTunes de las películas, que permitirá a sus suscriptores descargar, de forma ilimitada y sin ningún costo, películas y programas de televisión directamente al televisor.El CEO de la compañía anunció a la revista estadounidense Wired, que planea ofrecer la totalidad de los títulos existentes en DVD "de forma instantánea, en alta resolución, a cualquier televisor, en cualquier parte del mundo". Las compañías de televisión por cable serían las principales perjudicadas de llegar a realizarse el sueño de Hastings, quien desde la fundación de la compañía, en 1997, tuvo en mente la idea de ofrecer sus servicios por internet y no solo por correo tradicional. La nueva operación del negocio comenzó por hacer uso del servicio a computadores y consolas de video, para lo cual firmó un convenio de exclusividad con Xbox. Pero ahora que las conexiones a internet son cada vez más frecuentes en los televisores y que la tecnología de los teléfonos móviles lo permite, Netflix buscará ofrecer sus servicios a una red más amplia de usuarios. De hecho, el CEO de la compañía no descarta que pronto comience el desarrollo de una aplicación que les permitiría a los usuarios de iPhone acceder al servicio, según comentó en una entrevista con Reuters.Actualmente, cerca de tres millones de personas utilizan los servicios virtuales de Netflix y se descargan alrededor de cinco millones de películas y programas de televisión por semana. Se espera que para finales de este año, cerca de diez millones de electrodomésticos estén equipados con Netflix y "es posible que en pocos años, casi la totalidad de aparatos electrónicos con conexión a internet incluyan Netflix", aseguró Hastings a Wired.El alcance del servicio tiene preocupados a muchos en el negocio de la televisión y las películas. Y no es para menos, la empresa está empleando estrategias de innovación abierta para buscar la colaboración de investigadores del mundo entero. Recientemente, Netflix otorgó un incentivo de US$1 millón a un grupo de siete científicos e ingenieros que diseñaron un método para pronosticar la clase de películas que prefieren los clientes con miras a mejorar su sistema de recomendación de películas. Y ya tienen gente de todo el mundo pensando en dos nuevos retos, para los que ofrecen US$500.000 y US$1 millón.Después de haber sacudido el mercado de los alquileres de películas en Estados Unidos y de impactar negativamente la venta de DVD en ese país, por ofrecer un servicio más barato, fácil, cómodo y más conveniente para los clientes que las tiendas de video, la acción de Netflix pasó de su nivel más bajo en un año, US$17,9 por acción el pasado 27 de octubre, a su máxima valoración, US$50,24 el 13 de abril de este año, precio que podría superar en lo que resta del año. La amenaza de Netflix ahora es para las compañías de televisión por cable.
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