Inversionistas apuestan por los conglomerados comerciales

UN HÍBRIDO ENTRE LAS GALERÍAS Y LOS CENTROS MODERNOS

Cyber Plaza demandó una inversión cercana a US$20 millones. Se preparan hasta tres proyectos similares en otras zonas de la ciudad
Por Christian Navarro Rojas

Piero Dellepiane ha cambiado de clientes. Antes, como gerente general del Club de Regatas Lima, tenía que preocuparse por sus socios y concesionarios. Pero, desde hace unas semanas, se está haciendo cargo de administrar las instalaciones del centro comercial Cyber Plaza, un proyecto ubicado en el conglomerado tecnológico de Wilson y que albergará unas 400 tiendas de pequeños empresarios, quienes --según Dellepiane-- son tan o más exigentes que el Regatas.

CONGLOMERADOS A MÍ
Mientras que grupos comerciales como Interbank o Falabella están buscando grandes terrenos para sus proyectos, los conglomerados comerciales de Lima han estado, hasta ahora, lejos de su mirada. La informalidad que campea en ellos explica en parte este desinterés. Pero también los altos valores de los terrenos. En Gamarra, el metro cuadrado de un local comercial puede costar US$15.000; mientras que en Polvos Azules vale US$10.000.

"Los grandes operadores están buscando otros mercados", sostiene Gonzalo Barandiarán, gerente general de Inmobiliaria Riscal, empresa promotora de Cyber Plaza. Sin embargo, el potencial comercial de los conglomerados no es nada desdeñable. El año pasado sus ventas superaron los US$3.200 millones, más que los centros comerciales modernos, que vendieron US$1.600 millones (y que para este año pronostican US$2.250 millones).

LO MEJOR DE DOS MUNDOS
El proyecto de Riscal, en el que participa César Benites (socio del estudio Benites, Forno & Ugaz Abogados), estaría dando origen a un nuevo formato comercial que combina las bondades de un centro comercial moderno y una galería tradicional, donde los operadores de los locales son a la vez propietarios.

Tiene una infraestructura moderna y una administración centralizada y profesional que gestiona un fondo de promoción para desarrollar marca y generar tráfico. Además, Riscal está manteniendo el 54% del accionariado del proyecto, lo que le permitiría no cometer los mismos errores que llevaron, por ejemplo, al centro comercial Camino Real, en San Isidro, al fracaso.

Y viene más. Benites presentó hace días la idea de un nuevo centro comercial, esta vez en Las Malvinas (en la avenida Argentina), donde invertiría, con otros socios, unos US$20 millones.

Se sabe que hay dos terrenos más, en Wilson y en las cercanías de Polvos Azules, esperando para ser desarrollados.

MODELO A PRUEBA
En la medida que Cyber Plaza aún no abre sus puertas al público (su inauguración se prevé para el primer trimestre del 2009), se trata de un modelo de negocios que está por probarse.


"Uno de los elementos que te asegura la propiedad del proyecto es mantener un mix de tiendas óptimo, en el sentido de que la oferta se puede ir acomodando a lo que el mercado requiere", señala Percy Vigil, gerente general del Mega Plaza y ex presidente de la Asociación de Centros Comerciales y de Entretenimiento del Perú (Accep).


Esperemos que el tiempo y las ventas abran paso a un nuevo formato comercial peruano.


LA FRASE
"Los conglomerados concentran su oferta en un solo lugar y son generadores de un tráfico de público muy interesante"
JUAN JOSÉ CALLE. PRESIDENTE DE LA ACCEP

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