La bolsa chilena se desacopló de sus principales referentes externos. Ayer bajó marginalmente, pese al optimismo de los inversores en EE.UU. tras las palabras de Ben Bernanke en y al interés doméstico por papeles del retail.
Las palabras del presidente de la Fed, Ben Bernanke, en relación a mantener la tasa de interés bajo por un tiempo prolongado, que fueron determinantes para la recuperación de los mercados externos, no fueron suficientes para que se generara optimismo en la bolsa local. Esta actuó desalineada por la necesidad de caja de los inversionistas para participar en el remate de hoy del 6,44% de LAN, lo cual los obligó a liquidar posiciones en otros activos.
Así, el IPSA retrocedió 0,1% finalizando en 3.814,92 puntos (redujo su rentabilidad anual a 6,5%), mientras que el IGPA bajó en igual magnitud concluyendo en 17.740,89 unidades.
En la sesión anterior se transaron montos por $51.029 millones a través de 3.887 negocios, destacando las operaciones por $11.759 millones efectuadas en los instrumentos de la serie B de SQM, las que cedieron 1,4% a $19.234. Estas se vieron afectadas por la respuesta del mercado a la decisión de la compañía de paralizar operaciones mineras, argumentando una menor demanda mundial por nitratos y yodo.
El retroceso del mercado accionario pudo haber sido mayor, de no mediar el interés de los inversionistas de tomar posiciones en las empresas de retail, que tienen una incidencia cercana a 11% en el IPSA.
Al crecimiento de 2,4% de los papeles de Cencosud a $2.021,8 (con operaciones por $6.683 millones), se sumó la valorización de 1% de los activos de Falabella a $2.979,3 (totalizándose compras y ventas por $2.316 millones). En la misma línea, los títulos de Ripley ascendieron en 1% su valor a $458,5, con montos por $190 millones.
La sesión de este jueves estará marcada por lo que ocurra antes de la apertura de la bolsa chilena, ya que a las 9:15 horas se materializará el remate de un 6,4% de la propiedad de LAN que estaba en manos del presidente electo, Sebastián Piñera.
Para la operación –inscrita por el banco de inversión Celfin Capital– se determinó un precio mínimo por acción de $9.099,58 (el mismo valor que le fue ofrecido a la familia Cueto), por lo que el próximo Mandatario percibirá por esta transacción unos US$376 millones.
Esto se sumará a información macroeconómica proveniente desde el exterior, destacando en la agenda las solicitudes semanales de subsidio por desempleo y las órdenes de bienes durables de EE.UU.
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